El Dr. Alfonso Ramos Cruz fue un médico pediatra
badalonés y el último alcalde del franquismo de Badalona durante los años 1977
y 1979.
Se formó en el Frente de Juventudes y llego a
ser delegado local. Seguidor del alcalde Felipe Antoja, este el eligió como
concejal por el tercio corporativo el 1971, con Isidro Caballería como primer
teniente de alcalde, al que Ramos acabaría sucediendo en la alcaldía tras su
dimisión. Sufrio una de las etapas más difíciles por todas las luchas sociales
que se estaban produciendo.
Durante la transición democrática fue el apoyo
externo de UCD. Llamado, según un informe del Gobierno Civil el 1 de enero de
1979, «el Suárez de Badalona», el Dr. Ramos se tuvo que enfrentarse con una de
las etapas más importantes y difíciles de la política municipal. El
Ayuntamiento quedó prácticamente sin poder de actuación: después de los
resultados del 15 de junio de 1977 en la Ciudad, el Consistorio en pleno
presentó la dimisión del gobernador civil, que no fue aceptada, y se formó un
gobierno en paralelo, la Mesa de partidos, formado por los partidos que tenían
representación en el Congreso (PSC, PSUC, PSC-Reagrupament y CDC) y también con
ERC y PTE por su trayectoria en Badalona, pero no se incluyó la UCD, porque se
creía que los concejales del Ayuntamiento la representaban. La actuación del
gobierno del Dr. Alfonso Ramos Cruz fue fiscalizada por el gobierno paralelo y
se evitó así la posibilidad de nuevas maniobras especulativas negativas para la
ciudad, de hecho el Dr. Alfonso Ramos Cruz pactó que no tomaría ninguna
decisión importante sin consultarlo.
Entre agosto y septiembre de 1978 hubo uno de
los momentos más delicados entre el Ayuntamiento y los partidos políticos: el
gobierno municipal no aprobó el Plan Especial de Reforma de Dalt de la Vila,
pero sí lo hizo la Corporación Metropolitana , esto terminó con la paciencia de
Dr. Ramos y del resto del consistorio, que volvieron a presentar la dimisión,
pero nuevamente no fue aceptada. Un buen número de concejales respondieron con
una huelga de brazos caídos. Debido a esto el Ayuntamiento se paralizó y se
propuso el nombramiento de un concejal gestor para hacer funcionar el
consistorio. La discusión fue más fuerte especialmente entre Dr. Ramos y el Gobernador
Civil José María Belloch, si bien también participaron los partidos políticos. El
13 de septiembre de 1978, hizo un comunicado llamado “El Alcalde a los
badaloneses”, donde pidió a la ciudadanía su participación y colaboración en la
gestión municipal, y declaraba que el gobernador civil había autorizado la
inclusión de un concejal gestor y que el consistorio funcionaría a través de
mesas de trabajo. En 1978 hubo una conspiración en su contra por parte de un
grupo de tenientes de alcalde que no querían perder cotas de poder y no
toleraban que los partidos políticos se metieran en los asuntos municipales,
pero el Dr. Ramos salió reforzado y, de esta manera, la Mesa asumió la
dirección de algunos servicios municipales. Después de su etapa en el
Ayuntamiento, el Dr. Ramos no se atrevió a ponerse en frente de la candidatura
de UCD.
Actualmente vive distanciado de la política en compañía de sus hijos.
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